El Parlamento de Guinea Ecuatorial aprobó ayer los presupuestos de importantes entidades estatales: GEPETROL, SONAGAS y GETESA, empresas clave para el desarrollo económico y el bienestar social en el país. Estos presupuestos no solo reflejan la fortaleza económica, sino también un compromiso renovado con la transparencia y la equidad en el uso de los recursos.
GEPETROL, la empresa estatal de petróleo, prevé ingresos de 983.252 millones de Francos CFA, con un considerable aporte del sector petrolero, estimado en 532.611 millones. Esta cifra promete un resultado positivo de 523.639 millones, lo cual impulsa las posibilidades de inversión en proyectos estratégicos que podrían beneficiar a la población mediante mejoras en infraestructura y creación de empleo.
SONAGAS también anticipa ingresos sólidos, proyectando 104.013 millones de Francos CFA. Sin embargo, el Parlamento ha enfatizado la necesidad de atender los desafíos en el suministro de gas doméstico y reducir la disparidad en los precios de las bombonas entre la región insular y continental. SONAGAS ha explicado que esta diferencia se debe a los costos de transporte, derivados de la falta de infraestructura en algunas zonas. La empresa ha asumido el compromiso de estudiar soluciones que garanticen el acceso equitativo al gas en todo el país.
En el área de telecomunicaciones, GETESA muestra una perspectiva alentadora con un resultado positivo proyectado de 11.191 millones de Francos CFA. La empresa planea mejorar sus servicios de telefonía móvil y fija, respondiendo a la demanda de los diputados para una cobertura más amplia y tarifas más accesibles. Esto contribuiría a una mayor conectividad y oportunidades de desarrollo para todos los ecuatoguineanos.
Finalmente, los diputados han subrayado la importancia de que los presupuestos presentados sean consistentes con los acuerdos tomados en la conferencia presupuestaria con el Ministerio de Hacienda. Este paso hacia una mayor responsabilidad en la gestión de los recursos públicos marca el inicio de un ciclo de crecimiento y transparencia que podría transformar la calidad de vida de la ciudadanía. Ahora, la implementación y el seguimiento de estos compromisos serán cruciales para hacer realidad estas proyecciones y fortalecer la confianza pública en el desarrollo nacional.