El Gobierno de Guinea Ecuatorial ha presentado cifras económicas alentadoras que confirman su compromiso con la estabilidad financiera, a pesar de los desafíos globales. Según el informe presentado por el Primer Ministro encargado de la Coordinación Administrativa, Manuel Osa Nsue Nsua, el país cerró el ejercicio de 2023 con un superávit fiscal de 178.600 millones de XAF, lo que representa un 0,3 % del Producto Interior Bruto (PIB). Este resultado se alcanzó a pesar de una notable caída en los ingresos petroleros, lo que destaca la resiliencia de la economía nacional.
El año 2023 trajo consigo retos importantes, especialmente en el sector de los hidrocarburos, que sufrió una reducción tanto en los niveles de producción como en los precios internacionales. Sin embargo, los ingresos totales del Estado alcanzaron 1.623.603 millones de XAF, lo que superó en un 113 % las previsiones iniciales y significó un crecimiento del 28 % en comparación con 2022. De esta cifra, los ingresos petroleros representaron 1.398.560 millones de XAF, un 32 % menos que el año anterior, mientras que los ingresos no petroleros aportaron 225.043 millones de XAF.
En cuanto a los gastos, el Gobierno ejecutó un total de 1.445.003 millones de XAF, un 103 % de lo presupuestado y un 12 % más que en 2022, debido principalmente a un aumento en la inversión pública, que alcanzó los 494.955 millones de XAF. A pesar de este incremento, el país logró mantener el superávit, reflejando un enfoque eficaz en la gestión del gasto público.
El análisis del primer semestre de 2024 también arrojó resultados positivos, con un superávit provisional de 14.552 millones de XAF. Durante este periodo, los ingresos estatales alcanzaron los 675.922 millones de XAF, mientras que los gastos fueron de 661.370 millones de XAF.
No obstante, el Primer Ministro advirtió que este superávit es de carácter transitorio, debido a la continua reducción en los ingresos petroleros. A medida que avance el año, se espera que las ejecuciones de los compromisos de gasto ajusten estas cifras, aunque se confía en que las finanzas públicas mantendrán su estabilidad general.
Con vistas a 2025, el Gobierno ha diseñado un presupuesto equilibrado que proyecta ingresos por un total de 1.405.969 millones de XAF, lo que supone un 13 % menos que en 2023. Esta reducción se debe en gran medida a la esperada disminución en los ingresos petroleros, un fenómeno que refleja las condiciones del mercado global.
Sin embargo, el Gobierno ha previsto un aumento del 4 % en los gastos, que alcanzarán los 1.403.408 millones de XAF. Este incremento se destinará a áreas clave como la inversión en infraestructura, la educación, la sanidad y la protección social, con el objetivo de estimular el crecimiento económico y mejorar la calidad de vida de los ciudadanos. De esta manera, el presupuesto del próximo año se presenta con un ligero superávit de 2.560 millones de XAF, lo que subraya el compromiso del país con una gestión fiscal prudente.
A pesar de los desafíos que enfrenta el sector de hidrocarburos, la economía de Guinea Ecuatorial demuestra signos de fortaleza y capacidad de adaptación. El Gobierno, consciente de la importancia de diversificar las fuentes de ingresos, está implementando medidas para optimizar la gestión financiera, atraer inversión extranjera y reducir la dependencia del petróleo. Estas estrategias, junto con una administración eficaz del gasto, permiten al país mantener un rumbo estable hacia la reactivación económica.
